Cuando todo parecía decidido, Monfero quiso dar una última sorpresa. Al poco de empezar el tramo, Alberto Hevia sufría un trompo que le hacía perder cerca de diez segundos. A pesar de contar con cierto colchón con respecto a Pedro Burgo, el poleso que salía con intención de administrar su renta en el último tramo apuraba el frasco de las esencias para enmendar el fallo y lograr que al final Burgo sólo le recortara dos segundos. Con esto, Hevia lograba repetir la victoria final alcanzada el año pasado, cuando debutaba con su Skoda Fabia S2000.
En la Mitsubishi EVO Cup, el interés se centraba en ver si Senra podría con la presión de tener a sus espaldas a todo un campeón de España como Miguel Fuster, aunque el colchón con el que contaba el de Dumbría era más que suficiente para que no le inquietara para adjudicarse el triunfo, y de paso consolidarse en el último escalón del podium final del rallye.
Más tranquilo fue el final de la Copa Suzuki Swift. Aitor Fernández, líder de la general, marcaba el mejor tiempo en el tramo, seguido a casi cinco segundos por Pinilla y a más de siete por Víctor Pérez.